Evitar basura en las calles, tema de cultura cívica
Con motivo de la temporada de lluvias un hecho que sale a la luz es la cantidad de basura que se encuentra en las calles y esto no tiene más razón de ser en que hay habitantes de esta ciudad capital que tiran o abandonan sus desperdicios en la vía pública y que no hay suficientes contenedores y servicios de recolección de desperdicios. Hablo de botellas de plástico y envolturas de alimentos, papeles y cartones, colillas de cigarrillos y excrementos de mascotas. Se piensa que no pasa nada, que otro lo recoja o que el gobierno debe ir a limpiar.
La basura, tenemos claro, influye en que se tapen las coladeras de las arterias viales y se generen charcos y hasta inundaciones pero si fuéramos un poco más responsables nos haríamos cargo de algo tan sencillo como asegurarnos de que el frente de nuestras casas esté barrido. También de recoger cualquier basura que pueda obstruir desagües y alcantarillas cercanas a nosotros.
Cuando mantenemos despejado de basura nuestro alrededor evitamos la acumulación de residuos que, de fondo, contaminan el suelo y agua, y protegemos nuestros ecosistemas locales. Asimismo, se mejora la apariencia de la ciudad lo que nos genera orgullo y pertenencia a esta. Otro aspecto es que, al mantener limpias las calles se previene la propagación de enfermedades.
Se nos tiene que quitar la pereza y dejadez, evita tirar basura a la calle y recoge la que esté a tu alcance; es un tema de conciencia cívica o de cultura de interés por el entorno.