Crean una prueba de orina que puede ayudar a detectar el VPH
El cáncer de cuello uterino representa una de las mayores amenazas para la salud de las mujeres en todo el mundo. Según datos recientes, en 2022 se registraron aproximadamente 660 mil nuevos casos y 350 mil muertes a nivel global, cifras alarmantes que subrayan la necesidad urgente de mejorar las estrategias de detección y prevención.
Los métodos actuales para la detección del cáncer de cuello uterino incluyen pruebas de ADN del VPH y citologías vaginales, más conocidas como pruebas de Papanicolaou. Sin embargo, estos procedimientos, aunque efectivos, pueden ser incómodos y requieren visitas al médico, lo que puede disuadir a muchas mujeres de someterse a ellos.
Esta situación es aún más crítica en países de bajos y medianos ingresos, donde el acceso a servicios de salud especializados es limitado.
Un equipo de científicos internacionales ha desarrollado una solución innovadora que podría transformar la detección del VPH y, por ende, la prevención del cáncer de cuello uterino. Liderados por el profesor Etsuro Ito de la Universidad de Waseda, el profesor Toshiyuki Sasagawa de la Universidad Médica de Kanazawa y el doctor Martin Müller del Centro Alemán de Investigación Oncológica, estos investigadores han creado un ensayo inmunoenzimático ultrasensible, conocido como ‘Elisa’. Este nuevo método permite detectar las oncoproteínas de alto riesgo del VPH16 E7 en la orina.
Impacto en países de bajos y medianos ingresos
Las barreras económicas y logísticas a menudo dificultan el acceso a las pruebas de detección tradicionales. La prueba de orina ofrece una alternativa viable, económica y fácil de implementar, lo que podría llevar a una disminución significativa en las tasas de cáncer de cuello uterino en estas áreas.
La innovación detrás de la prueba de orina para la detección del VPH marca un hito en la lucha contra el cáncer de cuello uterino. Al proporcionar una herramienta más accesible y menos invasiva, se abre la puerta a una mayor participación en los programas de cribado, una detección temprana más eficaz y, en última instancia, una reducción en la incidencia y mortalidad de esta enfermedad.
Además, la prueba de orina tiene el potencial de aumentar significativamente las tasas de participación en los programas de cribado. Al ser un método menos invasivo y más accesible, es probable que más mujeres se sientan motivadas a realizarse la prueba, lo que podría conducir a una detección temprana más efectiva. La detección temprana es crucial, ya que mejora notablemente las posibilidades de un tratamiento exitoso y reduce la mortalidad asociada al cáncer de cuello uterino.